La relación entre una adolescente y su misterioso padre represaliado, quien guarda un gran secreto. Misterio y sensibilidad con una fotografía digna de Vermeer.
FLOR EN LA SOMBRA
Yo adoraba a mi padre, mi pequeño Dios.
Tenía poderes que me dejaban asombrada
usaba el péndulo para hallar aguas ocultas
conocía los secretos del corazón de la tierra.
Fui tan feliz aquellos años en aquella casa
La Gaviota se llamaba, qué nombre tan raro.
No olvidaré el día de mi primera comunión
la fiesta y aquel pasodoble vestida de novia.
Mi padre fumaba y bebía licor al atardecer
solitario, ausente, en un rincón del café.
Tras el ventanal mojado, parecía escuchar
los latidos remotos de antiguos fantasmas.
Mi padre escribía cartas a un antiguo amor
una mujer misteriosa de la gran pantalla.
Una vez la vi en la cartelera del viejo cine:
Flor en la sombra, la última de Irene Ríos.
He estado muy enferma, el médico ha dicho
que debo cambiar de aires, huir de este frío.
Recuerdo todo esto mientras hago la maleta.
Pronto partiré, alguien me espera en el Sur.
*Apolinar Gómez. Cinestesia (inédito).
Pantalla Abierta 